Ava Dellaira, escritora de literatura juvenil y guionista, autora de “Cartas de amor a los muertos”, visitará la Argentina invitada por la Embajada y V&R Editoras entre el 3 y el 6 de octubre. Entre otras actividades, brindará una charla en el MALBA, dictará un workshop para jóvenes escritores y firmará sus libros en una librería de la ciudad de Buenos Aires.
Ava por sí misma
Nací en Los Angeles. Uno de los primeros recuerdos que tengo es verme mirando por la ventana del Cadillac mientras atravesábamos el desierto cuando nos mudamos con mi familia a Albuquerque, Nuevo México, donde crecí y donde mi hermana y yo pasamos juntas innumerables tardes de verano cocinando pociones mágicas, batallando contra brujas malvadas y jugando otros juegos imaginarios que probablemente contribuyeron a mi inclinación por inventar historias.
Recuero haber escrito por primera vez en segundo grado. La tarea era escribir un poema sobre las cosas que me gustaban y por qué. Empecé bastante modestamente así: “Me gustan los arco iris porque son bellos. Me gustan los gatitos bebé porque son suaves”. Después escribí: “Me gusta mi Mamá…” pero no pude terminar la oración. Me acuerdo como si fuera hoy porque fue la primera vez que me di cuenta de la distancia que existe entre un sentimiento y las palabras para expresarlo. Ninguna palabra parecía lo suficientemente importante para expresar lo que sentía. Pensé en todas las cosas que me encantaban de ella, todas las cosas divertidas que hacíamos juntas y finalmente me quedé con: “Me gusta mi Mamá porque me trajo al mundo”. Eso parecía ser lo más básico. En parte, su hermosa vida y su repentina y prematura muerte (justo después de terminar el college) me inspiraron a escribir “Cartas de amor a los muertos”.
Mucho crecimiento… (historias para otro momento). Fui al college en la Universidad de Chicago, luego terminé una maestría en Bellas Artes en el Taller para Escritores de la Universidad de Iowa. En Iowa, viví en el piso de arriba de una granja en la que alguna vez también vivió Kurt Vonnegut (¿suena divertido, no?) y estudié poesía.
Después de graduarme en la Universidad de Iowa, me mudé a Los Angeles con la ilusión de convertirme en guionista, y tuve la buena suerte de poder trabajar para Stephen Chbosky, autor de “Las ventajas de ser invisible”. Cuando le presenté algunos de mis escritos, él me dijo: “Tendrías que escribir una novela”. De hecho, la idea nunca se me había ocurrido pero esa noche, de regreso a casa, quedé absorta contemplando la luna creciente mientras esperaba que cambie el semáforo en rojo, y se me ocurrió el título: “Cartas de amor a los muertos”. Empecé a escribir el libro esa misma noche.
Ahora vivo en Santa Mónica, en un departamento diminuto cerca de la playa. Algunas de mis actividades favoritas son correr, caminar o andar en bicicleta por la playa. Dejo las ventanas casi siempre abiertas, inclusive en invierno. (¡Saludos al sur de California!) También me encanta ir al mercado de frutas y vegetales y comprarme flores, hacer fiaca mirando tele e ir al cine (donde siempre soy la que hace ruido comiendo pochoclo en el momento en que se supone que hay que hacer silencio). No tengo perro pero espero tenerlo muy pronto. Me encanta pasar el tiempo con mi novio y mi hermosa familia. Voy a Nuevo México cada vez que puedo (soy adicta al cielo abierto infinito de ese lugar). A veces vuelvo en auto del trabajo a casa y todavía me asombra la inmensidad azul del agua que veo por delante mientras bajo por la colina y me siento muy agradecida de estar acá. También me siento así al publicar mi primer libro y estoy profundamente agradecida a todos ustedes por leerlo.