La Navidad, celebrada por la mayoría de los cristianos el 25 de diciembre, conmemora el nacimiento de Jesús de Nazaret. Al igual que muchos pueblos del mundo, los estadounidenses han desarrollado sus propias tradiciones y prácticas, las que se han transformado con el transcurso del tiempo. Hoy día, la mayoría de los estadounidenses combinan las costumbres religiosas y seculares con las tradiciones de su propia familia.
EL DESARROLLO DE LA NAVIDAD ESTADOUNIDENSE
Los primeros puritanos de Nueva Inglaterra no veían bien las celebraciones bulliciosas. En 1659, la colonia de Massachusetts tipificó como delito, por breve tiempo, la observación de la fecha y la Navidad siguió siendo una jornada laboral en gran parte de Nueva Inglaterra y Pensilvania. En otras partes de la Norteamérica británica, sin embargo, se celebraba con gusto, con fiesteros disfrazados que iban de puerta en puerta y que recibían pequeños obsequios de comida y bebida.
Las navidades modernas, más comercializadas, comenzaron a aparecer en el siglo XIX con la nueva costumbre de comprar regalos para los niños pequeños. La temporada de compras navideñas empezó a adquirir importancia económica.
Otras tradiciones navideñas también comenzaron en el siglo XIX. Papá Noel, en inglés Santa Claus, derivado del holandés Sinter Klaas y del alemán San Nicolás, asumió la personalidad de un alegre repartidor de regalos y piloto de un trineo tirado por ciervos a través de obras como el poema de 1823, “Una visita de San Nicolás”, de Clement Clarke Moore. y una imagen del ilustrador Thomas Nast en la revista Harper’s Weekly en 1983.
Según se cree, el árbol de Navidad se remonta a Martín Lutero, el clérigo alemán del siglo XVI. La leyenda relata que en una víspera de Navidad, Lutero llevó un abeto a casa y lo adornó con luces para recordarles a sus hijos las maravillas de la creación divina. La costumbre se expandió a Gran Bretaña y a Estados Unidos en el siglo XIX. En la actualidad muchos estadounidenses compran un árbol de hojas verdes perennes recién cortado como el pino, o réplicas de aluminio y plástico que pueden volver a usarse. El árbol de Navidad se decora con luces y ornamentos. En muchas familias los regalos aparecen debajo del árbol la mañana del 25 de diciembre, puestos allí por miembros de la familia o, como podrían creer los niños más pequeños, por Papá Noel.

PRÁCTICAS CONTEMPORÁNEAS
Puesto que las ventas de Navidad son tan importantes para los comerciantes, la Navidad se ha convertido en una “temporada”. El día después del feriado de Acción de Gracias se conoce como el “viernes negro”. Es un día importante para ir de compras lo que permite a los negocios tener ganancias y quedar con las cuentas “en negro”, y puede representar una porción sustancial de las ganancias anuales.
Esta temporada extendida de Navidad desde el Día de Acción de Gracias hasta Navidad tiene mucho más que ver que con las compras. Para muchos estadounidenses es una época de buena voluntad y una ocasión para ofrecerse como voluntario. Las festividades no cristianas que se celebran casi en la misma época del año, sobre todo la Janucá judía y el Kwanzaa afroestadounidense, también se funden en lo que se considera una “temporada festiva” más amplia.
Programas con temas navideños como la película “Es una vida maravillosa” y la película de dibujos animados “Rodolfo, el reno de la nariz roja” se presentan en televisión. En las cuatro o seis semanas anteriores al 25 de diciembre, más y más estaciones de radio adaptan su formato para ofrecer, a veces exclusivamente, música navideña.
El significado religioso original de la celebración se mantiene como su principal elemento para muchos. Las iglesias ofrecen servicios religiosos muy concurridos la víspera de Navidad y a la medianoche. Algunas incluyen Misas de Navidad o una dramatización del nacimiento de Jesús.
Al igual que tantos otros aspectos de la vida cultural del país, la Navidad en Estados Unidos refleja los valores de un pueblo libre y diverso.