El Atlántico Medio

La Campana de la Libertad en Filadelfia, sonó por primera vez el 8 de julio de 1776 para celebrar la Declaración de Independencia.
La Campana de la Libertad en Filadelfia, sonó por primera vez el 8 de julio de 1776 para celebrar la Declaración de Independencia.

El Atlántico Medio comprende a los estados de Delaware, Maryland, Nueva Jersey, Nueva York, Pensilvania y la capital de la nación, Washington, DC.

Si Nueva Inglaterra aportó el talento y el dinero para la expansión de Estados Unidos en el siglo XIX, los estados del Atlántico Medio suministraron la fuerza necesaria. Los estados más grandes de la región, Nueva York y Pensilvania, se convirtieron en emporios de la industria pesada (hierro, vidrio y acero).

El Atlántico Medio fue colonizado por gente mucho más heterogénea que Nueva Inglaterra. Inmigrantes holandeses se establecieron en la parte baja del valle del río Hudson, en el actual estado de Nueva York. Los suecos se instalaron en Delaware; católicos ingleses fundaron Maryland y una secta protestante inglesa, los Amigos (cuáqueros), colonizó Pensilvania. Al cabo del tiempo, todas esas colonias cayeron bajo el control inglés, pero la región siguió siendo un imán para gente de diversas nacionalidades.

Casi todos los primeros colonizadores de la región eran granjeros y comerciantes, y ésta fue un puente entre el Norte y el Sur. Filadelfia, en Pensilvania, a medio camino entre las colonias norteñas y sureñas, fue la sede del Congreso Continental, la convención de delegados de las colonias originales que planeó la Independencia de Estados Unidos. Esa misma ciudad fue cuna de la Declaración de Independencia en 1776 y de la Constitución de Estados Unidos en 1787.

Baltimore, junto con otros puertos en EE.UU., es parte del impulso comercial que demuestra la economía estadounidense. (© AP Images)

Cuando la industria pesada se extendió por toda la región, algunos ríos, como el Hudson y el Delaware, se convirtieron en vías vitales de navegación y crecieron en forma espectacular las ciudades ubicadas junto a masas acuáticas: Nueva York en el Hudson, Filadelfia en el Delaware y Baltimore en la Bahía de Chesapeake. Nueva York sigue siendo hoy la ciudad más grande de la nación, el eje de sus finanzas y el centro de su cultura.

Igual que en el caso de Nueva Inglaterra, gran parte de la industria pesada de la región del

Atlántico Medio se ha reubicado en otros lugares. Pero otras industrias, como la farmacéutica y las comunicaciones, han llenado el vacío.