El secretario de Agricultura de los Estados Unidos Sonny Perdue viajará a Buenos Aires del 27 al 29 de julio para participar en la reunión de Ministros de Agricultura del G20. Durante la reunión, el Secretario tratará importantes cuestiones que enfrenta la agricultura en todo el mundo y mantendrá diálogos sobre políticas con sus contrapartes. También participará en actividades en la Exposición Rural, la principal muestra agrícola de la Argentina.
“Valoramos enormemente la estrecha relación con nuestros socios en materia agrícola”, dijo el secretario Perdue. “La oportunidad de tratar los desafíos más urgentes que enfrenta la agricultura en la actualidad es invalorable, pero hay mucho trabajo por hacer, y espero con interés ver qué podemos lograr”.
El secretario Perdue comenzará su visita en Buenos Aires el 27 de julio, participando de la Cumbre del G20 que se centrará en una diversidad de cuestiones que abarcan el futuro de la fuerza laboral en el sector agrícola, infraestructura y un futuro alimentario sustentable. Con posterioridad a la cumbre, el secretario Perdue visitará la Estancia de Polo “Doña Sofía” en San Antonio de Areco el 29 de julio, donde se reunirá con el propietario del establecimiento, el plantel veterinario y de cría para conversar sobre nuevas tecnologías de cría y genética para ganado equino y bovino.
Bioografía:
Sonny Perdue conoció la agricultura a la manera tradicional: nació en una familia de campo en Bonaire, Georgia. Desde su infancia y durante su vida en el mundo de los negocios y en el ámbito público, Perdue vivió la industria desde todos los aspectos posibles. Experimentado hombre de campo, productor y empresario agropecuario, veterinario, legislador estadual y gobernador de Georgia, asumió como el 31° secretario de Agricultura de los Estados Unidos el 25 de abril de 2017.
Las políticas de Perdue como secretario de Agricultura de los Estados Unidos estarán guiadas por cuatro principios que regirán sus decisiones. En primer lugar, maximizar la capacidad de los hombres y mujeres del sector y los negocios agropecuarios en los Estados Unidos para crear empleo, producir y vender los alimentos y las fibras que proveen de sustento y vestimenta al mundo y cosechar la merecida recompensa de su trabajo. La meta del gobierno estadounidense debería ser remover cualquier obstáculo y brindarles a los productores agrícolas, ganaderos y productores en general, oportunidades de prosperar. En segundo lugar, el Secretario dará prioridad todos los días al servicio al cliente para los contribuyentes y consumidores estadounidenses. Esperan y tienen todo el derecho a exigir que su gobierno se encargue de los intereses del pueblo de manera eficiente y efectiva con la máxima integridad. En tercer lugar, los ciudadanos estadounidenses esperan un abastecimiento seguro de alimentos y el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos continuará prestando servicios en la función crítica de garantizar que la comida que ponemos en la mesa para alimentar a nuestras familias cumple con los estrictos parámetros de seguridad que establecimos. La seguridad alimentaria es un componente clave de la seguridad nacional porque el hambre y la paz no coexisten por largo tiempo. Por último, el Secretario siempre recordará que la abundancia agrícola proviene directamente de la tierra. Hoy, esos recursos de la tierra brindan sustento a más de 320 millones de estadounidenses e incontables millones de personas en todo el mundo. Las palabras del padre del secretario Perdue todavía tienen vigencia: “Todos somos administradores de la tierra, como propietarios o arrendatarios, y nuestra responsabilidad es dejarla mejor de lo que la encontramos”.
Asimismo, el Secretario reconoce que la agricultura estadounidense necesita un fuerte defensor para promover sus intereses en los mercados internacionales. Estados Unidos cuenta con la bendición de poder producir más de lo que sus ciudadanos pueden consumir y esto implica que deberíamos vender el excedente en todo el mundo. La relación entre el Departamento de Agricultura y sus representantes comerciales como así también con el Representante de Comercio de los Estados Unidos y el Departamento de Comercio será vital. El trabajo de promover productos agrícolas en otros países comenzará con esas relaciones y nos beneficiará internamente al mismo tiempo que cumple con el imperativo moral de ayudar a alimentar al mundo. El Secretario se ha comprometido a ser un acérrimo defensor de la agricultura estadounidense.
Bajo el liderazgo del secretario Perdue, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos llevará adelante su misión siempre en función de hechos y de manera informada, tomando decisiones con un enfoque orientado al cliente. El Secretario buscará soluciones a los problemas y enfrentará con determinación los desafíos difíciles que pudieran presentarse.
En su juventud, mientras crecía en un establecimiento tambero y de cultivos diversificados en la zona rural de Georgia, Perdue nunca tomó plena conciencia de que las bendiciones de trabajar con una meta y un sentido darían tan buena recompensa como le sucedió en la vida. Cuando era un joven, alimentaba a los terneros y araba la tierra como uno de los trabajadores de la granja de su padre. Hijo de una maestra que ejerció la enseñanza de inglés durante 42 años, también se benefició de sus lecciones, no sólo por inculcarle las creencias que todavía mantiene con cariño sino también por transmitirle el aprecio y el respeto por el lenguaje y la correcta gramática. Pero más que cualquier otra cosa en su vida, fue la vida en la granja familiar lo que formó al secretario Perdue. Ha vivido y respirado la alegría de una gran cosecha y el desaliento y devastación que produce una sequía. Experimentó personalmente el consejo de su padre cuando era niño: “Si cuidas la tierra, la tierra te cuidará a ti”.
La ética del trabajo cimentada en sus raíces rurales ha caracterizado al Secretario a lo largo de toda su vida. En su juventud, sirvió a su país en la Fuerza Aérea de los Estados Unidos y alcanzó el rango de capitán. Después de obtener un doctorado en Medicina Veterinaria de la Universidad de Georgia, aplicó sus conocimientos en la práctica privada en Carolina del Norte. Fue miembro del Senado del Estado de Georgia durante once años y alcanzó el cargo de Presidente pro tempore por votación del resto de sus colegas. Como gobernador de Georgia durante dos mandatos, fue reconocido por transformar el déficit presupuestario en superávit, aumentar significativamente el desempeño de los estudiantes en escuelas públicas y promover un entorno económico que permitió a los empresarios desarrollarse y a los fabricantes y productores agropecuarios, alcanzar niveles record de exportaciones. Además de estos logros, desarrolló posteriormente una carrera exitosa en el ámbito de los negocios agropecuarios, concentrada en los commodities y el transporte a través de empresas diseminadas por todo el sudeste de Estados Unidos. Estas experiencias han sido de incalculable valor para su actual función como el principal defensor de la agricultura estadounidense y todos los ámbitos relacionados.
El Secretario cree firmemente en el buen gobierno, en que debería funcionar eficientemente y responder a las necesidades de sus clientes: el pueblo de los Estados Unidos. Como senador del estado fue reconocido como un referente en cuestiones de energía, servicios públicos, agricultura, transporte, tecnologías emergentes y desarrollo económico y por su capacidad para comprender los matices de problemas complejos. Como gobernador, reformó las prioridades presupuestarias, ayudó a los habitantes de Georgia a crear más de 200.000 nuevos puestos de trabajo y promovió a su estado natal en todo el mundo para atraer nuevos negocios. En 2009, la revista “Reason Foundation’s Innovators in Action” reconoció al Secretario como un líder “que implementó activamente nuevas estrategias para aumentar la efectividad y eficiencia del gobierno y dar valor agregado a menor costo para los contribuyentes”. En octubre de 2010, la revista “Governing” también lo nombró “Funcionario Público del Año”. Hasta el día de hoy, su enfoque nunca está muy lejos de los deseos de los ciudadanos – los verdaderos dueños del gobierno.
Su visión sobre temas agrícolas siempre estuvo determinada por su conocimiento personal de todos los aspectos de la industria, como productor y como hombre de negocios agropecuarios. Conoce las inquietudes y necesidades diarias de los productores agropecuarios estadounidenses y comprende también las complejidades de los mercados mundiales de commodities. Es reconocido como líder nacional en la industria agrícola. Integró la comisión directiva de la “National Grain & Feed Association” (Asociación Nacional de Granos y Alimento Forrajero), fue Presidente de la “Georgia Feed and Grain Association” (Asociación de Alimento Forrajero y Granos del Estado de Georgia) y de la “Southeastern Feed and Grain Association” (Asociación de Alimento Forrajero y Granos del Sudeste”. Mantiene lazos cercanos e históricos con líderes de la organización no gubernamental “American Farm Bureau”. Fue reconocido por las organizaciones que promueven la educación agrícola y STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemática) para jóvenes: Georgia 4-H y FFA, entre otras, por su liderazgo en el sector agrícola.
Oriundo de Georgia, un estado en el que la agricultura es el principal motor de la economía, reconoce que la agricultura es un área e industria que atraviesa las fronteras político-partidarias. Reconoce que el tamaño, alcance y diversidad del sector requiere consenso bipartidario de manera que las cuestiones partidistas no interfieran en la búsqueda de buenas soluciones para los productores agrícolas, ganaderos y consumidores estadounidenses.
El Secretario Perdue está casado hace 45 años con Mary Ruff Perdue y el matrimonio tienen cuatro hijos adultos y catorce nietos. El y su esposa han sido padres sustitutos de ocho niños en espera de adopción. El Secretario mantiene su licencia de piloto de aviones comerciales y de helicópteros y practica activamente deportes al aire libre.